Para no olvidar...

Todos los seres humanos nacemos siendo originales y únicos. Lamentablemente muchos mueren copias. A.L. - Haz lo tuyo, siempre.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Ahora hago parte de Cairo

A diferencia de muchas experiencias que otros chicos han tenido, a mí si me recogieron en el aeropuerto.

Bajar del avión, tomar un bus interno, pasar inmigración, esperar la maleta (sabiendo que a muchas personas no les llega) y luego realizarse de que en verdad has atravesado el Atlántico, muchos ojos sobre tí de señores con barbas y vestidos largos y ropa cubriendo la cabeza, en ocasiones hasta la cara de las mujeres, no hablas árabe, no ves a nadie de los que te van a recoger, encima tienes a una amiga reciente que conociste en el vuelo hasta Cairo, es de Guatemala que viaja a Alejandría al proyecto que por poco elijo y que gracias a una amiga me dijo que era malo no lo elegí. Ella comienza a llorar de la emoción cuando se baja del avión. Está muy emocionada. Su nombre es Sofía. Yo simplemente no puedo decir nada.
No podía creerlo. Aún tengo momentos en que no puedo creerlo.

Había muchas personas en el aeropuerto, logro pasar por un pequeño espacio con mi maleta y veo la cara de Amr Ehab, el responsable de mí y de mi proyecto. Luego veo a Mohamed Sawy, él es el encargado de que yo esté bien. Smile. Respiro. Cambio mi chip de lengua. Me "echo" la bendición, respiro de nuevo. Estoy bien. Estoy en Cairo. Sonrío de nuevo. Me emociono. Saludo. Abrazo a todos los que están ahí. Le doy gracias a Dios y le pido entendimiento.
Les digo que debo avisarle a mi mamá. Sawy me regala un minuto, me dice que llamar es muy barato. Mamá contesta. Smile again. Dios me ama. Le grito a mamá que estoy en Cairo, que estoy bien, que ya voy al orfanato. Respiro por última vez y comienzo a observar. Cambio mis primeros dólares.

Sí, hay polvo pero sin exagerar, no como algunos me preguntan. Todo está en árabe, pero algunas personas hablan inglés. También en algunos lugares hay números de los nuestros.
Los hombres me miran raro. Las personas miran mi cabello. Voy dentro del carro de Sawy.

Luego de unos minutos, me explican que vamos a un lugar a celebrar mi llegada, que mas tarde iremos al orfanato. Comienzan a hablarme, contarme y preguntarme por cosas.
Si usted, señor lector me conoce sabrá que yo hablo mucho. Esta vez, yo simplemente no tenía palabras. Parecía una pequeña mirando por la ventana. Incluso Sawy me dijo que por qué tan callada. Y yo pensé: "Este no me conoce" jajajaja.

Fuimos a un lugar que me encantó, porque tenía karaoke. Allí recibí una cerveza gigante a la que me invitaron. Estaban por cerrar el lugar. Esa era la última noche abierto.

Llegué al orfanato. Tenía miedo. ¿Dónde dormiré? ¿Cómo será?
Un señor de barba me recibió. Tenía mucho susto.
Luego conocí a Hekma. Me presenté, el "May" se le hizo fácil.
Recibí mi cuarto. 2 camarotes, buen colchón, un closet para mí de tres que tiene la habitación.
Me dieron llave del cuarto.
Conocí el baño:tenía sanitario. Respiré.
Organicé mi ropa y dije para mis adentros, ahora sí "let's do it!".

Hoy es mi tercer día aquí. Ya tengo celular e internet en mi ipad. No me funciona el skype, pero al menos puedo comunicarme por otras redes sociales.

Cada vez me doy cuenta que la cultura no es tan difícil o cerrada. Las niñas del orfanato me quieren. Me abrazan, quieren tocarme siempre el cabello, la cara, darme besos.
Apenas me estoy aprendiendo sus nombres.

Hoy fui a cine y antes de entrar a la sala, mi amigo Safwat me estuvo enseñando los números.
Ya se decir gracias.
Algo es algo.
Mi reto es aprendérmelos esta semana.

Muchos retos para el viaje.
Ahí van algunas foticos. :D











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